lunes, 7 de abril de 2008

Normalment oui!




Ya es hora de desmitificar las cosas. Uno que es de una ciudad de provincias, y por tanto inocente y muy impresionable, cuando se entero que por casualidades de la vida iba a terminar trabajando y viviendo en la capital de Europa, me creia que los perros iban a ir atados con longaniza en vez de correa de cuero y que las calles iban a ser de una mezcla entre queso y chocolate. Muchos me decian: Bruselas? Que aburrido, no?! Yo esperaba compensar el aburrimiento de la ciudad con el placer de vivir (como novedad) en una ciudad donde la gente es civilizada, todo funciona, y donde lo mas sucio que puedas encontrar fuera la suela de tus zapatos (y porque acabas de salir de casa).




Y ni lo uno, ni lo otro. Bruselas es una ciudad caotica, desordenada, donde las cosas no suelen funcionar, o si funcionan, lo hacen por casualidad. Por tanto, es casi de todo, menos aburrida, ya que cada dia es una sorpresa. Para ser justos, hay que decir que tambien hay una Bruselas ordenada, limpia, donde todo funciona, y un poco mas aburrida; pero a esa nunca voy. Otro mundo es posible, pero es tan caro...




Asi que vamos a centrarnos aqui en la parte de Bruselas que no funciona, decadente y permanentemente en los 70 (o en los 30, va por barrios). Empezare a hablaros del surrealismo, que como decia Magritte, es mas una forma de ver la realidad que ocurre diariamente en Bruselas que un concepto artistico abstracto. Una ciudad con dos idiomas oficiales (frances y flamenco), donde se habla mas en ingles o en arabe que flamenco. Un sistema publico de transporte que no cubre suficientemente la ciudad, que se acaba bastante pronto (un poco despues de medianoche), que esta viejuno y con un tufillo setentero que valdria millones en concepto de decoracion de interiores si no fuera porque no es un vintage retro sino que realmente no se ha tocado desde los 70. Una ciudad con muchisimos extranjeros, la mayoria trabajando en las Instituciones Europeas o oficinas/empresas satelites, con juventud, tiempo, dinero y ganas de salir, con una oferta bastante limitada y costosa, y un trato al cliente que deja muchisimo que desear. Parece que el exito de un bar esta mas asegurado mientras mas despotas y perdonavidas sean los camareros del mismo. Solo hay que ir un viernes noche a cualquier bar de Pl. Lux, el Cafe Belga o L'Ultime Atome. Un centro historico lleno de suciedad, polucion, edificios feos, coches por todos sitios y poquitas cosas que visitar (desde el punto de vista turistico). Unos horarios comerciales reducidisimos (de lunes a sabado, de 9 a 6) que obligan a comprar los sabados (porque entre semana coincide con mi horario laboral), dia que dan pocas ganas de comprar porque TODO el mundo hace lo mismo. Y un largo etcetera de despropositos y anecdotas que nos hace pensar a veces que mas que encontrarnos en la capital de Europa nos encontramos en la capital de Africa (con todos mis respetos para las capitales africanas).


"Bueno Kike, pero entonces por que vives en Bruselas?"


Pues en parte, por todo lo de arriba, y por mas. Es una ciudad, pequeña y manejable, pero aun asi tiene de todo. Una ciudad que, a pesar de su reducido tamaño, tiene muchos barrios/ambientes diferentes entre si, a veces en cuestion de calles puedes estar en los bares mas pijos donde van los eurocratas a los mas cutres del barrio africano. Es una ciudad descuidada y decadente, pero que se cuida mucho de organizar todo tipo de eventos y festividades para sus habitantes (ya sea por barrios, o de modo global); solo teneis que escuchar LHF, especificamente la seccion de Agenda de Bruselas para descubrir todo lo que la ciudad tiene que ofrecer semanalmente en cuanto a festivales, conciertos, exposiciones, teatros o fiestas. A pesar de que el servicio deja mucho que desear, puedes comer de las comidas mas ricas del mundo, sin salir de tu barrio; hoy, chino autentico, mañana, brasileño, pasado, pizza italiana, etc. Y lo que mas me gusta, ese halo de cutrez, de perpetua caida, de precipitacion hacia el vacio en el que vive suspendida la ciudad, la cual parece que, si fuera por muchos de sus habitantes, instaurados en la desidia, podria desaparecer perfectamente hoy sin que a nadie le importara.
Una ciudad donde te sientes como en casa porque no es la casa de nadie. Y al no ser la casa de nadie, es la tuya.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

genial!!, pero a partir del segundo párrafo me agobio y no puedo seguir leyendo. No es nada personal, me pasa con cualquier documento-sábana que no incluya sexo, drogras o violencia extrema. Todo gracias a mi educación moral judeo cristiana. En fin. Paz.

Kike dijo...

Oido cocina.

Prometo un proximo articulo con sexo, drogas y violencia extrema (en ese orden) pour "epater a la bourgeoisie"

Un saludo y a seguir leyendo el blog de LHF!

Anónimo dijo...

100% cierto.