Como quiera que sea, y dado que ahora nos toca repasar las fotos de los amigos, taggear en el facebook y comentar las peripecias veraniegas, queremos rendir un merecido homenaje a un personaje sin el cual no habría verano ni playa digna de tal nombre. Si señores, el GUIRI.
La denominación GUIRI, parece provenir del vocablo "guirigay" con el que se denomina a un lenguage incompresible, otros dicen que viene del turco, donde guiri significa "ticket" y aparece en todas las entradas de museos, pero el concepto va mucho más allá.
Vilipendiado y denostado desde los años 60, el guiri no sólo levanta nuestra maltrecha economía si no que nos deja mil y una anécdotas que alegran nuestros días de asueto.
Sin importar el calor sofocante visitan nuestro rico patrimonio y comen nuestras paellas de Burgos a euro el grano de arroz sin rechistar. Se ponen a bailar la macarena mientras agitan un vaso de sangría aguada con una sonrisa de oreja a oreja y soportan nuestras mofas con desparpajo mientras esperan pacientemente a que termine la hora de la siesta para poder comprar.
Hemos, todos juntos, de valorar en su justa medida la labor de estos aguerridos turistas, que dejan su tierra y sus costumbres, para calzarse unos calcetines blancos, unas chanclas y a volar!.
Las principales carácterísticas del GUIRI:
- Frecuentemente calzan sandalias con calcetines, para gran alborozo de los nativos.
- Suelen comprar sombreros mexicanos producto típico español por excelencia.
- Portan cámaras caras, para gran alborozo del raterillo local.
- Al menor contacto con el sol, adquieren lo que se conoce como "moreno centollo".
- Acompañan al cocido o cualquier otra delicia local con Coca-Cola y Keptchup.
¿conóces alguna más?